El trabajo de un jugador de rugby empieza en los entrenamientos, uno debe sufrir y pasarlo mal para superarse. Un entrenador me dijo una vez "El jugador de rugby es aquel que llora en el entrenamiento y ríe en el partido", desde que me lo dijo lo llevo siempre tatuado en el cerebro. A este deporte se juega con el cuerpo caliente y la cabeza fría, y para ello debemos empezar en el terreno de entrenamiento.
Hay entrenamientos de todo tipo, con balón, sin balón, de choque, de defensa, de ataque, de placaje... pero sin duda el mas difícil de todos es el de disciplina. La disciplina es lo que mas cuesta entrenar y lo que mas cuesta sacar en jugadores que no la tienen, pero es muy necesaria.
En esta entrada quiero dedicarla a la parte de entrenamiento con balón, ese preciado tesoro a recuperar y a guardar en un partido. Los entrenamientos con balón son realmente necesarios en este deporte, en primer lugar decir que un balón de rugby es de forma ovalada, recuerda mas a un melón que a un sandía para que nos entendamos, de ahí que los argentinos lo llamen la ovalada, la oval... el deber de todo jugador dentro del campo es proteger la pelota, evitando que nadie del otro equipo se la pueda arrebatar. Para ello, todos debemos aprender a chocar con el hombro contrario al que portamos el balón, debemos trabajar para limpiar en las abiertas, debemos empujar en cada maul, debemos sufrir, llorar, recibir golpes, dejarnos la piel... durante todos los entrenamientos de balón, para así el día que llega el partido, no dudemos, y con la cabeza fría seamos capaces de no perder una sola pelota en todo el partido.
A lo largo de mi vida deportiva he llegado a sumar muchos entrenador, y uno me dio la gran definición de que es un jugador de rugby, y dice así si no recuerdo mal: "Un jugador de rugby es aquel al que no se le cae la pelota, el que no falla un solo placaje, el que empuja en cada maul y se deja la piel por recuperar un balón, quien sufre por los demás y pide el cambio cuando no puede mas, pero sobretodo ha de ser humilde", todos los que se entrenan sean de la categoría que sean intentan esto, ser así, trabajar para los demás, arrimar el hombro de forma literal y no literal por un compañero.
El hecho de hacer entrenamientos de balón no es solo para recuperarlo o para luchar por el, si no también para saber pasarlo, pues el pase en rugby no es como en el resto de deportes, dependiendo de hacia donde ataque el portador del balón solo puede pasarlo hacia atrás, lo cual hace que entrenar pasas sea algo fundamental en este deporte. Según en la posición que juguemos nuestro pase será diferente, si el pasador es un delantero su pase será mas corto y mas colgado a un compañero, si por el contrario el pasador es un jugador de la tres cuartos será mas largo y tenso. Pese a que cada jugador tiene su posición y su estilo de pase determinado, es importante que se aprenda a pasar de todas las formas, y hacia ambos lados, pues según seamos diestros o zurdos se nos dará mejor un pase u otro.
Para cierre de esta entrada dejare una cita celebre de Louis Malle, quien hizo una definición de este deporte que me ha resultado cuanto menos curiosa.
Hay entrenamientos de todo tipo, con balón, sin balón, de choque, de defensa, de ataque, de placaje... pero sin duda el mas difícil de todos es el de disciplina. La disciplina es lo que mas cuesta entrenar y lo que mas cuesta sacar en jugadores que no la tienen, pero es muy necesaria.
En esta entrada quiero dedicarla a la parte de entrenamiento con balón, ese preciado tesoro a recuperar y a guardar en un partido. Los entrenamientos con balón son realmente necesarios en este deporte, en primer lugar decir que un balón de rugby es de forma ovalada, recuerda mas a un melón que a un sandía para que nos entendamos, de ahí que los argentinos lo llamen la ovalada, la oval... el deber de todo jugador dentro del campo es proteger la pelota, evitando que nadie del otro equipo se la pueda arrebatar. Para ello, todos debemos aprender a chocar con el hombro contrario al que portamos el balón, debemos trabajar para limpiar en las abiertas, debemos empujar en cada maul, debemos sufrir, llorar, recibir golpes, dejarnos la piel... durante todos los entrenamientos de balón, para así el día que llega el partido, no dudemos, y con la cabeza fría seamos capaces de no perder una sola pelota en todo el partido.
A lo largo de mi vida deportiva he llegado a sumar muchos entrenador, y uno me dio la gran definición de que es un jugador de rugby, y dice así si no recuerdo mal: "Un jugador de rugby es aquel al que no se le cae la pelota, el que no falla un solo placaje, el que empuja en cada maul y se deja la piel por recuperar un balón, quien sufre por los demás y pide el cambio cuando no puede mas, pero sobretodo ha de ser humilde", todos los que se entrenan sean de la categoría que sean intentan esto, ser así, trabajar para los demás, arrimar el hombro de forma literal y no literal por un compañero.
El hecho de hacer entrenamientos de balón no es solo para recuperarlo o para luchar por el, si no también para saber pasarlo, pues el pase en rugby no es como en el resto de deportes, dependiendo de hacia donde ataque el portador del balón solo puede pasarlo hacia atrás, lo cual hace que entrenar pasas sea algo fundamental en este deporte. Según en la posición que juguemos nuestro pase será diferente, si el pasador es un delantero su pase será mas corto y mas colgado a un compañero, si por el contrario el pasador es un jugador de la tres cuartos será mas largo y tenso. Pese a que cada jugador tiene su posición y su estilo de pase determinado, es importante que se aprenda a pasar de todas las formas, y hacia ambos lados, pues según seamos diestros o zurdos se nos dará mejor un pase u otro.
Para cierre de esta entrada dejare una cita celebre de Louis Malle, quien hizo una definición de este deporte que me ha resultado cuanto menos curiosa.
"En el rugby hay de todo,
es una comedia humana de
sensibilidad, de esperanzas y de
decepeciones, de risas y de lágrimas"
Louis Malle
(1932 - 1995)
es una comedia humana de
sensibilidad, de esperanzas y de
decepeciones, de risas y de lágrimas"
Louis Malle
(1932 - 1995)
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